Sí, hay que tener fe en que te va a ir muy bien con tu empresa. Pero también se necesita actuar estratégicamente con muchos detalles y un punto clave es cómo se va a llamar tu negocio. El nombre de tu empresa puede llegar a ser un eje articulador en muchas partes de tu operación mercantil.

A veces pienso que es más difícil ponerle nombre a una empresa que a un bebé. Pero veamos. De repente cuando le pones apodo a un amigo parece que le encontraste una característica que a esa persona la hace inigualable… que la describe perfectamente bien. Ese es el espíritu. Más o menos así hay que proceder hacia un buen branding de tu negocio. Si vas a “bautizar” a tu empresa te recomiendo lo siguiente:

1. Piensa en nombres cortos

Nada de trabalenguas, por más ingenioso que sea o por más encariñado que estés. Hay que alejarse del capricho de alguna idea “genial” (según tú) y tener mente abierta para ver opciones menos complejas.

2. Fácil de recordar

Justamente la ventaja de un nombre corto –y cuya pronunciación no sea complicada– dará como resultado que sea fácil de recordar, de ubicar.

3. Evita nombres obvios

Si el nombre es demasiado explicativo no causará nada de impacto.

4. No uses iniciales

Aunque hay marcas que han logrado posicionar sus nombres a base de siglas, en realidad estas son poco atractivas y difíciles de recordar y, por lo mismo, su posicionamiento en Internet es considerablemente más caro. Lo recomendable es confiar en nombres cortos que resulten interesantes para tu público.

5. No crear confusión con otras marcas

Hemos visto que el comercio informal tiene la osadía de bautizar productos casi con el mismo nombre y logotipo de marcas reconocidas internacionalmente (por ejemplo, unos tenis “Mike” hasta con palomita y todo). ¡No se te ocurra hacer eso!

Hay otras consideraciones que te pueden servir para crear un buen nombre, por ejemplo:

• Realiza una lluvia de ideas
• Busca que el nombre aluda a algo relacionado con tu empresa
• Puedes combinar prefijos o sufijos y la actividad o evocar la idea de bajo costo
• Puedes inspirarte en tu historia y anécdotas personales o empresariales, el lugar en el que te encuentras o alguna de sus palabras típicas
• Piensa en palabras que puedan ser usadas como verbos, por ejemplo Google, “googlear”
• Trata de diferenciarte. Si tu competencia usa anglicismos o nombres clásicos quizás el tuyo tiene que ser exactamente lo contrario
• Busca que el nombre se pueda convertir fácilmente en un logotipo
• Investiga si ese nombre no existe ya en el mercado
• Si se te complica mucho, puedes buscar generadores de nombres para empresas en Internet

Por otro lado, hay agencias que cuentan con copywriters expertos en la creación de nombres y slogans. Una agencia te puede ofrecer, además, la realización de estudios de mercado que te llevarán al nombre ideal para tu negocio.

Tu empresa tendrá, si no es que ya la tiene, una personalidad. ¡Explota lo mejor de ella para que su nombre sea representativo!